La tarea de elegir una impresora 3D requiere de un estudio previo, y aquí dejamos una serie de claves que te permiten saber si un modelo es el adecuado para ti o no.
Es importante que tengas en cuenta los puntos que vamos a mencionar a continuación. Dependiendo del tipo de uso que le vayas a dar a tu impresora puede que tengas un modelo perfecto para tus necesidades o uno que te limitará de forma innecesaria.
1. Material en el que vas a imprimir
A la hora de escoger tu impresora 3D, una de las primeras consideraciones que debes tener es saber que tipo de filamentos y material que te gustaría utilizar para imprimir tus objetos. Por lo tanto, si todavía no lo has pensado, hazlo en primer lugar.
Ten en cuenta que no todos los materiales y filamentos tienen el mismo precio ni son tan versátiles, así que compra un modelo acorde al material que vas a utilizar en tu día a día.
Evidentemente, las impresoras 3D compatibles con más materiales son también más costosas., sin embargo, existen 2 tipos de filamentos populares el ABS y el PLA. El ABS tiene mayor resistencia mecánica y si quieres imprimir en este material, debes considerar que tu impresora tenga una cama caliente.
2. Volumen de impresión (Tamaño del objeto a imprimir)
El segundo consejo para comprar una impresora 3D es tener claro cuál es el tamaño aproximado de los objetos que vas a crear con este dispositivo. Puede parecer una obviedad, pero este dato va a influir sustancialmente en el modelo a elegir.
Mientras más grande es el área de impresión más costosa será la impresora y tambien más tiempo demorará la impresión. Una alternativa para imprimir un volumen grande es dividirlo en varias piezas pequeñas que depués puedas ensamblar. Si quieres crear maquetas y objetos más aparatosos, vas a tener que desembolsar una mayor cantidad de dinero para adquirir el dispositivo.
3. ¿Ensamblada o en kit?
Si has investigado un poco ya debes saber que en el mercado encontrarás dos tipos de impresoras 3D: por un lado están las que vienen ya ensambladas y listas para empezar a ser utilizadas, y por otro lado encontramos las que vienen en piezas, llamadas también en kit, que el propio usuario tiene que montar.
Si te gusta más el segundo tipo, es recomendable que tengas algunos conocimientos de ensamblaje mecánico y electrónica para poder encajar las piezas de forma correcta. Suele ser una tarea importante y requiere pasiencia. Por este motivo, si estás empezando, un buen consejo es comprar una impresora 3D ya ensamblada.
4. Open Source, la mejor opción para usuarios avanzados
Si eres un usuario avanzado y ya has tenido la oportunidad de utilizar varias impresoras 3D, hay una sorpresa en este mundillo que que te va a proporcionar horas y horas de diversión. Se trata de las impresoras Open Source, que son los modelos que te permiten introducir modificaciones y mejoras, ya sea a través del software o mediante la impresión de nuevas piezas para mejorar su usabilidad. Hay tambien impresoras que tienen una comunidad grande de usuarios que van adicionando accesorios e introduciendo tips para imprimir.
5. Resolución de la impresión
En impresión 3D, la altura de capas es sinónimo de resolución o definición. Esto es similar a lo que ocurre con las cámaras digitales y los pixels o Mega pixels. Mientras más pixels mejor definición de la imagen. Al igual que en las imágenes digitales, se requiere mejor resolución en objetos curvos y/o sinuosos. En una imagen de un cuadrado por ejemplo, se requiere de menor cantidad de pixels para representar la forma, pero al agregar detalles se necesita mayor resolución.
Podemos ver que en los bordes rectos donde los cuadrados o pixeles están alineados, la imagen es clara, pero en las esquinas donde debería ser curvo se forma una baja fidelidad al modelo original.
6. Tipo de extrusor
La función principal del extrusor es desplazar el filamento desde la bobina hasta el HotEnd de la manera más precisa y a la velocidad adecuada para la impresión 3D, pero existen diferentes clasificaciones de los extrusores
Extrusores Directos
Imprimir materiales flexibles, tanto PLA Soft o TPU, como TPE (FilaFlex) en 1.75mm y 2.85mm.
Imprimir todo tipo de materiales sin problemas, sin tener en cuenta la abrasión que presentan ciertos filamentos. Para imprimir 3D materiales abrasivos, por ejemplo Grafeno, recomendamos utilizar el Nozzle Olsson Ruby, una boquilla de latón con la punta de rubí que tiene una vida casi infinita.
Este sistema necesita cortas longitudes de retracción para obtener buenas impresiones 3D, con lo que se reduce la probabilidad de que produzca un atasco
Extrusores Bowden
Bajas inercias en el eje de desplazamiento del HotEnd. En el sistema Bowden al estar el extrusor y el motor del extrusor anclados al chasis de la impresora 3D se reducen mucho las inercias en el movimiento para realizar la impresión. Esto permite realizar impresiones muy rápidas y a la vez de alta calidad.
Alto poder de arrastre del filamento. La mayoría de impresoras 3D que utilizan este sistema de extrusor (BCN Sigmax, 3NTR-A2) tienen un conjunto de piñones (grupo reductor) que aumenta el par de arrastre del filamento, pudiendo así mover bobinas de mayor tamaño al normal, como las bobinas de PLA o de ABS de 3.3Kg Smartfil.
7. Tipo de HotEnd
El HotEnd es el encargado de fundir el filamento para poder realizar la pieza deseada. En él se configura el tipo de HotEnd (V6 o Volcano) y el nozzle en función del diámetro del material, en función del tipo de pieza, calidad y acabado que se desea obtener. Clasificamos de esta forman los extrusores en tipo V6 y Volcano y a continuación citamos las ventajas e inconvenientes entre estos dos tipos de HotEnd.
HotEnd V6
El V6 es el HotEnd más versátil del mercado, válido para todo tipo de impresiones, incluso para materiales flexibles (sobre todo con filamento de 2.85/3mm). Con el HotEnd V6 se puede realizar todo tipo de piezas con una calidad de acabado excepcional.
HotEnd Volcano
Gracias a la posición paralela del Cartucho Calentador respecto al nozzle se consigue una área calentada mayor, dando así un gran control y estabilidad sobre la fusión del filamento. Por todo lo anterior se pueden realizar impresiones 3D con mayor diámetro de nozzle (1.2mm), lo que conlleva menores tiempos de fabricación y la posibilidad de imprimir con una altura de capa mayor que en el V6.
Piezas más resistentes. Gracias a realizar capas más altas con un flujo laminar (sin burbujas) las uniones entre los enlaces químicos del material son más fuertes, dando piezas más rígidas y resistente
8. Velocidad de Impresión
La velocidad de impresión 3D no tiene mucho que ver con las impresoras tradicionales, y lo que hay que tener en cuenta son aspectos como la «velocidad de construcción» o la «velocidad de movimiento», además de la «tasa de deposición», factores que influyen en la rapidez con la que el material de impresión se va depositando en el modelo final. Por ejemplo, una tasa de deposición de 30 cm3 por hora indica que la impresora es capaz de depositar más material que otra que lo haga a 25, pero atención: aquí también influye la resolución o definición de la impresora, que permite que los modelos sean más o menos toscos.
Todos esos parámetros permiten tener una referencia a la hora de medir esa velocidad de impresión, pero en el tiempo final influye otro factor clave: el tamaño del modelo final. Cada impresora 3D tiene unos máximos, y lógicamente cuanto más grande sea el modelo y más aprovechemos esos máximos, más tardará en imprimirse el modelo.
9. Autocalibración
La impresora 3D de autonivelación no es necesaria pero si ahorra tiempo, como Maker’s podemos definir estas 3 preguntas para trabajar bien:
¿Desea una experiencia fácil y práctica con la impresora 3D?
¿Cuál es el nivel de habilidad con la impresora 3D?
¿Cuánto tiempo tienes en tu día a día?